

Quienes han comido en Paco Alcalde saben que somos un restaurante fiel a una cocina al más puro estilo tradicional: esa del buen comer, la que no sigue modas gastronómicas pasajeras y que se distingue por servir platos y tapas con raciones generosas.
Corría el año 1988 cuando la Sociedad Gastronómica Garbanzo de Plata de Nueva York nos distinguió con su famoso galardón: el “Garbanzo de Plata”. Fueron los años dorados de muchos restaurantes en la Barcelona del diseño y que era observada de cerca por Europa. Paco Alcalde era ya en los 80′ un restaurante familiar muy popular en la Barceloneta y que gozaba de buena fama en la ciudad, gracias a una suculenta carta, buenas tapas y un estilo casero y tradicional. El “Garbanzo de Plata” era, justamente, un premio que se otorgaba a locales como nuestro restaurante: negocios populares y conocidos por su calidad gastronómica que, a pesar de su categoría culinaria, no estaban en la lista de los consagrados. Paco Alcalde cumplía todos esos requisitos ampliamente. Quienes nos visitan hoy pueden ver en una de las paredes del salón principal colgada la placa de la distinción, donde puede leerse: “Gran ejemplo del buen comer catalán y magnífico representante de la simpática tradición española del tapeo”. Aquellos fueron los años en los que Rosalía Estrada (madre del actual director de Paco Alcalde) comandaba la gerencia general del restaurante. Una mujer de talante y carácter decidido y muy emprendedor con una idea muy clara del tipo de comida y servicio que quería ofrecer: Platos con ingredientes de calidad y de temporada, suculentos y cocinados por expertas y formadas cocineras españolas, a buen precio y en un ambiente familiar.
Muchos recuerdos de los buenos momentos vividos en los años de Rosalía Estrada permanecen hoy en las paredes del restaurante, en multitud de fotografías de caras alegres y satisfechas de famosos y clientes habituales. Muchos fueron los restaurantes en toda España que disfrutaron de tener el Garbanzo de Plata.
Y entre ellos, Paco Alcalde, un restaurante que puede presumir de tener al mando de los fogones a las mismas maestras cocineras de entonces: Puri y Fina, quienes con los años han desarrollado una experiencia y un talento que han mantenido a Paco Alcalde en la lista de los más genuinos restaurantes tradicionales de Barcelona.